lunes, 23 de enero de 2012

Adiestramiento del potro

El adiestramiento de potros se divide en varias fases:
La primera consiste en habituar al potro al manejo diario. Que tenga confianza en la gente (que se acerque cuando alguien entra en su corral), que vaya bien del ramal, que nos deje manipular todo su cuerpo, aceptación de exploraciones veterinarias o del herrador en su caso.

La segunda fase se centra en conseguir un claro liderazgo, que el potro entienda que la mejor idea es seguir nuestras indicaciones, que sea obediente y respetuoso. Habituación a las cuerdas, a la montura, riendas largas, paseos por el campo del ramal, etc.

Y por último entramos en la tercera fase que será a partir de los tres años cuando trabajaremos al potro montado. Una vez que el potro vaya cómodo con su jinete por el campo, podemos iniciar su adiestramiento para disciplinas concretas. Lo habitual sería empezar por el pleasure, para pasar luego al trabajo de rancho, como el Trail y el  trabajo con ganado, o en su caso al Reining.

Comportamiento del caballo

  • Comportamiento social del caballo: El caballo es un animal con tendencia a vivir en manada, en un grupo social. Como cualquier grupo, una manada de caballos se estructura a través de unas reglas y una de las más importantes es la jerarquía: cada caballo tiene una posición dentro del grupo, que será importante conocer para poder definir las características de la doma que necesitaremos realizar:
  • Las yeguas heredan su rango, no tienen que pelear por él, por ello se pueden mostrar hostiles entre ellas, ya que dos yeguas tienen siempre el mismo rango.
  • El macho debe luchar por alcanzar una posición priviligiada en la manada: esto le da un carácter mucho más duro y agresivo, lo que implica unas características que deberemos tener en cuenta en su doma:
    • Su manejo para el trabajo es más difícil.
    • Se rebelan con facilidad.
    • No aceptan las injusticias.
  • El semental jefe y la yegua jefa conviven al mismo nivel, sin disputarse ambos rangos.
  • El caballo de rango máximo (líder) puede echar a cualquier otro caballo del sitio en donde estén, sin ningún tipo de razón.
  • El caballo que tiene un rango inferior, no puede pasar por delante de otro con mayor rango. Irá por detrás y lo hará sin quejarse. Esto hace que, en situaciones de peligro, la manada no se disperse; el caballo de rango superior marca la dirección y el resto le siguen.
  • Los potros también seguirán a las madres sin separarse jamás de ellas.
  • El caballo de rango superior puede empujar a otros, lo hace con objeto de que la manada no se separe y además para rechazar a sementales jóvenes que comienzan a imponerse. Esta es la razón por la que el caballo obedece al jinete: ya que al quedar fuera de su espacio visual, para el caballo es como si el jinete fuera el semental que le está empujando.
Esta jerarquía existe en cualquier raza de caballo y es aceptada por todos sus miembros.
  • Su visión: el caballo tiene un campo de visión muy amplio, entre 340º y 360º, con las siguientes características:
    • Dispone de un campo ciego, que le impide ver en línea recta delante suyo, sobre algo   más de un metro.
    • La visión lateral con un sólo ojo no le permite percibir el relieve, por eso   deberemos permitirle girar la cabeza.
    • A pesar de que percibe mal los detalles, es muy sensible al movimiento.
    • Puede ver de noche.
  • Su oído: el sentido del oído en el caballo está muy desarrollado:
    • Puede escuchar sonidos imperceptibles para el hombre.
    • Sus orejas se orientan hacia el lugar en donde se ha producido el ruido.
  • Su olfato: es también un sentido muy desarrollado. Pueden llegar a reconocerse por medio de este sentido, siendo el que utiliza el potro para buscar a su madre.
  • Sus lenguajes: el caballo utiliza diferentes partes de su cuerpo junto con los sonidos para comunicarse, conviene saber qué quiere decirnos con cada uno de estos lenguajes:
  • Orejas: nos muestran el estado de ánimo del animal:
    • Lánguidas y caídas: significa que el caballo no está a gusto o se encuentra enfermo.
    • También es un síntoma de sumisión.
    • Erguidas y en movimiento: estado de vigilancia.
    • Enderezadas y giradas hacia delante: existe algo que le llama la atención.
    • Verticales: significan desconfianza.
    • Una oreja hacia delante y otra hacia detrás: duda (puede no haber comprendido algo de lo que estamos intentando transmitirle durante la doma).
  • Cola: símbolo de energía, sus movimientos también nos informan sobre el estado del caballo:
    • En alto: señal de alegría.
    • Entre las ancas: sugiere desconfianza.
  • Sonidos: a pesar de que el caballo no emite muchos sonidos, deberemos saber qué significa cada uno de ellos:
    • Bufido: cuando el caballo expulsa aire por su nariz, es símbolo de contento.
    • Mugido: indica temor o desconfianza ante algo que no conoce.
    • Gruñido: señal de dolor.
    • Chillido: normalmente es breve y agudo, y suelen ser las hembras quienes lo emitan, para manifestar su mal humor (casi siempre cuando se encuentran delante de otra yegua).
    • Relinchos: existen multitud de ellos, pero los más comunes son producidos por nerviosismo o cuando un caballo es apartado del resto de la manada, para llamar a sus compañeros.